martes, 6 de mayo de 2014

Just Saying.

Sé cómo es estar perdido, no saber hacia dónde dirigirte, ni cómo librarte de lo que hace que estés de esa manera. Esa sensación de agobio, como si te ahogaras y nadie acudiera en tu rescate, que te invade cuando no sabes qué estas haciendo con tu vida, cuando nada es como te imaginabas, cuando piensas en tu presente y no puedes evitar que se te llenen los ojos de lágrimas.

Sé lo que es que poco a poco tus sueños y deseos se hagan más lejanos y se vayan apagando hasta desaparecer por completo. No saber por qué has dejado que todo se te escapara de las manos, no saber dónde se han escondido las fuerzas que tenías antes, las ganas de avanzar y de conseguirlo todo.

Me he sentido tan mal a lo largo de estos años que no he dudado en comenzar a hacer cosas que podrían llegar a destruirme la vida e incluso a quitármela porque, al fin y al cabo, cualquier excusa era buena para hacerme olvidar. Puede que todo esto parezca una exageración, pero para mi es así, era lo único que podía hacer, encontrar otras obsesiones y otros medios de escape.
Como toda persona, he tenido mis altibajos, y momentos en los que decidía que no tenía que seguir más con todo aquello, que podía dejarlo atrás, pero siempre acababa retomando viejas costumbres. No es fácil resetear el cerebro y volver al punto de partida, puedes olvidarte durante una temporada más o menos corta y aún así llega cierto momento en el que no puedes evitar que tus pensamientos cambien de nuevo, no puedes evitar recordar la sensación de control sobre un dolor físico y localizado, ni la sensación de satisfacción que te recorre el cuerpo cuando estás consiguiendo lo que quieres, aunque no sea por el método adecuado.

Sé cuál es la sensación que se tiene cuando alguien nota que estás mal y te pregunta, sé lo que es querer echarse a llorar, escupir todo lo que te está destrozando, y librarte de ello durante unos minutos, pero también sé lo que es guardar la compostura, sonreír, y decir que todo va bien, o inventarte una excusa y no darle importancia al asunto, dejando escapar, en cierto modo, algún tipo de ayuda.

Pasan los días y cuando llega la noche te alegras porque por fin puedes alejarte de la realidad, y tienes una pequeña esperanza de que al día siguiente todo sea diferente, de que nada sea como antes. Sin embargo, eso nunca sucede.

Te escondes tras libros, música, películas, series... Al final, después de tantas historias vividas en tu mente, ni siquiera sabes quién eres en realidad, ni si de verdad te gustan todas esas cosas o si simplemente son una vía de escape más.

Escribiendo esto únicamente pretendo relajarme, librarme momentáneamente de algunas de las cosas que me atormentan. No quiero llamar la atención de nadie, ni dar pena, ni nada por el estilo. Podéis creéroslo, o pensar que es justamente lo contrario. Realmente, eso no me importa. Just saying.



miércoles, 19 de marzo de 2014

Now Fight!



And finally this question, the mystery of who's story it will be. Of who draws the curtain. 
Who is it that chooses our steps in the dance? 
Who drives us mad? Lashes us with whips and crowns us with victory when we survive the impossible? 
Who is it, that does all of these things?
Who honors those we love for the very life we live? 
Who sends monsters to kill us, and at the same time sings that we will never die? 
Who teaches us what's real and how to laugh at lies? 
Who decides why we live and what we'll die to defend? 
Who chains us? 
And Who holds the key that can set us free... 
It's You. 
You have all the weapons you need. 
Now Fight!




Sucker Punch (Zack Snyder)